Seguridad alimentaria en el hogar y estado nutricional de los adultos de la comunidad Piava Chupa, provincia de Imbabura, 2021

Abstract

La investigación realizada se planteó como objetivo caracterizar la seguridad alimentaria y el estado nutricional de los adultos de la Comunidad Piava Chupa, Provincia de Imbabura, 2021. El estudio tuvo un enfoque mixto cualicuantitativo, cuantitativo de tipo transversal y cualitativo de diseño deductivo, Se trabajó con una muestra de 35 personas en representación de cada familia. A quienes se les aplico cuestionarios de nivel de seguridad alimentaria, para lo cual se utilizó la Escala Latinoamericana y Caribeña de Seguridad Alimentaria (ELCSA), cuestionario de frecuencia de consumo de alimentos, datos sociodemográficos y registro de datos antropométricos como peso, talla, IMC y circunferencia de cintura como indicador de riesgo metabólico. Como resultados se obtuvo que el 89,2% de los jefes de hogar pertenecen al sexo femenino, de los cuales el 100% se autoidentificó como indígena, el 42,9% está en un rango de edad entre los 40 a 64 años, el 37,1 % tiene un nivel de educación secundaria, cuya principal actividad laboral es el de ama de casa con el 62,9%, los ingresos familiares son menores a los $ 200 USD por mes en el 42,9% de los casos. En cuanto al nivel de seguridad alimentaria el 54,3% de las familias presenta inseguridad leve, además el 94,3% cuenta con animales de granja para consumo propio y también el 80% posee un huerto del cual la cosecha se destina para consumo familiar, de tal manera que contribuye a la disponibilidad de alimentos en la comunidad. Se identificó que el 68,6% de la población presenta sobrepeso, situación que genera un estado de vulnerabilidad en cuanto a su estado de salud y nutrición. Los principales desafíos que enfrenta la comunidad en términos de seguridad alimentaria incluyen la falta de programas de educación nutricional, barreras para acceder a alimentos 11 nutritivos, como la falta de recursos económicos la poca disponibilidad de lugares para adquirir alimentos y principalmente la errónea idea de que una comida saludable tiene que ver más con la cantidad de alimentos que con la calidad de la alimentación. Es importante destacar la organización dentro de la comunidad y la participación activa de cada uno de sus miembros la cual les ha permitido poder enfrentar situaciones de crisis.